domingo, 8 de octubre de 2023

 

Proyectos y deseos


 

Para alguna gente, y sobre todo cuando se está en pareja. Validar un proyecto es una tarea ciclópea.

 

El deseo propio pierde valor hasta que la otra parte de la pareja le da su visto bueno.

 

Habría que aprender a vivir en una forma menos coercitiva y más comprensiva.

 

Todo comenzó cuando mi terapeuta, Eduardo, me pidió que enumerara mi lista de deseos ,base de futuros proyectos y después de mucho pensar y especialmente anonadada por mi descubrimiento, solo visualice uno, un collar de perlas....comida y por más que me esforzara ninguno más acudía a mi mente consciente.

 

Pensé toda esa semana con que de mi historia tendría que ver, cada vez me costaba elegir algo que me gustara y me prendía al deseo de los otros... que elegir en un restaurante para comer y tomar...que ropa elegir que zapatos etc etc

 

Una vez de pequeña me rebelé ante mi madre y le dije que yo prefería un pulóver celeste de angora y no el color verde oscuro con el que siempre me vestía, su respuesta me dejó sin habla y muy humillada.

 

- Sos una víbora desagradecida, con todo lo que yo hice por vos...

 

Todavía después de muchas décadas no logro desentrañar y darle significado a esas palabras...

 

Pero como todas las heridas de la infancia, aunque hayan sido cicatrizadas, cuando son muy profundas, queda la posibilidad de reabrirse   cuando las circunstancias son similares afectivamente y duelen tanto como en su momento lo hicieron.

 Entonces la respuesta es siempre la misma, hay una continua repetición de conductas de minusvalía ante la posibilidad de ser herido

 

 

Tal vez no pueda hacer una lista de deseos con soltura, pero una de des calificaciones y humillaciones me da la impresión que sería más fácil   Con poco esfuerzo, ya que están en un archivo muy cerca de mi mano...

 

Si hago el listado de situaciones donde ante la descalificación o la posibilidad de humillación me deja desarmada, es muy repetido y no se resuelve a pesar de los esfuerzos y promesas

 

 a través de la vida. No hay muchas respuestas donde me sienta bien parada y con otro sentimiento que el que me produjo el repetido de víbora desagradecida...

Y ni siquiera hacen falta esas fatídicas palabras ya que la autoestima se genera en la infancia

Con las virtudes que nuestros padres nos encuentran, en este caso sería de desvalorización y posteriormente estima baja.

Una vez se me ocurrió trabajar en villas de emergencia de lo que no me arrepiento, pero si es llamativo lo que dije al tomar la decisión de ir y fue, Tengo que devolver algo de lo que me fue dado, pude estudiar y formarme, y esta gente no tuvo la oportunidad, y agregaría, hay que ser agradecido….

 

 

Emigrantes

 Capitulo dos

Los afectos estaban concentrados…

 

En la vieja casa donde vivimos parte de la primera década de mi vida

Es decir después de los cinco años y hasta los doce compartimos nuestros días

Entre los amigos de mis padres y un solo hermano de mi padre, el tío Pedro , la esposa

Mi tía Estefanía y una bebé de ambos mi prima Adriana.

Ellos compartieron la casa con nosotros hasta que mi tío con ayuda de otros croatas

Construyó  una casa hermosa a solo dos cuadras de la nuestra .

Yo tenía una hermana un año menor con la que jugábamos después de clases,

Hasta que llegaba el fin de semana y nuestra casa se llenaba de gente. Entonces recibíamos besos

Abrazos y mucho cariño de otras personas y ya no solo de nuestros padres, se desconcentraba el

Afecto desde nuestro reclamo y la posterior gratificación  de los falsos parientes…les decíamos tio y tía a todos los amigos, que venían al principio a cantar. Habían armado un coro muy bueno, y luego o antes… debe haber sido antes la práctica, me dice el sentido común,  de comerse un cabrito al espiedo y cantar canciones croatas a viva voz que practicaban para una presentación posterior en el club de los Polacos donde se reunían varias colectividades pero esta vez los llamaban medios conciertos, no eran las canciones populares de entre casa que recuerdo aún.

El professor Nola, así se llamaba el director tenia un aparatito que soplaba y daba el tono para que comenzaran a cantar.

Mi hermana y yo jugabamos con los  hijos de los amigos de mis padres, que fueran un poco más grandecitos, ya que la mayoria eran bebés, me acuerdo de Ante Beslic, mi prima Adriana,

Entonces jugabamos con mi prima Andelka y mi primo Braco, un poco más grandes, sobro todo Andelka.

Las tres mi hermana Ceca , Andelka y yo nos sentabamos al borde de una pileta redonda más bien un pequeño estanque que estaba en el jardín al frente de la casa y que tenia como un Castillo o

  una Cueva al medio, llena de peces de colores, me parecía mágico, poner la mano dentro del agua y que los peces pasaran por el costado.

Con Andelka hablábamos en voz baja sobre los secretos familiares o cantabamos a dos voces, canciones que nos habíamos hartado de cantar en el auto cuando íbamos a las sierras.