martes, 20 de diciembre de 2011

Pedazos de vida en capítulos

Quisiera comentar ideas que le puedan servir a las mujeres que estén atravesando un proceso similar al mío.

Me presento, soy agradable, delgada, bastante alta, tengo cincuenta y pico, recién inaugurando una década que por como comenzó se perfila bastante tumultuosa... o es que toda mi vida yo me las arreglé para que mi vida fuera así...fueron contradicciones de mi existencia; sueño con la paz y el equilibrio y de alguna manera termino viviendo un torbellino en el que termino enganchada como si fuera arrastrada por los aires tomada de la cola de un barrilete.
Pero no me quiero quejar... estoy trabajando en lo que me gusta, ayudo a que la gente se encuentre a sí misma, y de esa manera se me devuelve mucho porque yo aprendo de las personas con las que tengo el honor de trabajar sobre la experiencia de vivir.

Además se me ocurrió trabajar en casa, y fue la mejor idea que tuve, me evité el stress de correr de un lado a otro, de gastar en transporte y de pagar alquiler, parece un tema menor pero no lo es para mí, en estas épocas de crisis cada centavo pareciera tener que ocupar su lugar.
Sería injusta conmigo misma si el hecho económico fuera, él solo, el responsable de mi decisión, no es así, yo amo mi casa, me encanta estar en ella, a diferencia de otra gente no pensaba que era necesario separar el trabajo de la vida cotidiana, no al menos el espacio físico.

Cuando trabajo o en otras circunstancias, me gusta estar rodeada de mis afectos y de mis cosas, por ahí me siento como si un caracol llevara su casa a cuestas por donde fuere.
Me produce un placer especial que me energiza y me pone muy bien, regar mis plantas entre sesión y sesión, cortarles las hojas marchitas, mientras admiro sus hojas verdes, los brotes y algunas flores, fuera de la temporada de floración, a pesar del tiempo frío las tomo como un regalo de la naturaleza.

No es fácil vivir hoy y menos en la forma que me propuse fuera mi vida, con sentido de solidez, de importancia, tratando que sea valiosa y consecuente.
Creo que lo que intento contar es que comienzo una nueva etapa buscando la excelencia en todos mis actos y relaciones con las personas que tengo la suerte de conocer y por alguna razón que me trasciende me acompañan en este trecho de mi existencia. Buceo en mi interior para conectarme con mis deseos y necesidades más profundas para iluminarme en el camino a seguir.

A medida que escribo me pregunto a mi misma si el tema de la excelencia, y de ser valiosa incluyen mis lados oscuros, la otra cara de la moneda, tal vez sería mejor hablar del mejor equilibrio, el que incluya mis opuestos, mis claros y mis oscuros y estos últimos iluminados por los claros de los que soy capaz.
Hay muchas cosas que he cambiado a través de los años desde mis creencias tan enfáticas sobre las cosas
O eran “blancos o negros”, y me dejaban la mayoría de las veces en la vereda de enfrente con la mayoría de las personas; La realidad podía ser leída desde innumerables ángulos, había alternativas y yo me las estaba perdiendo.
(continúa)